Jueves 21 de Enero del 2010.

El Coordinador de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas y la Asociación de Agencias de Desarrollo Internacional (AIDA) manifestaron que: "el cierre de la Franja de Gaza pone en riesgo la salud de la población de Gaza y socava el funcionamiento del sistema de atención de la salud".

Hoy, un año después de la ofensiva militar de Israel en Gaza, las agencias de las Naciones Unidas y la Asociación de Agencias de Desarrollo Internacional (AIDA), la cual representa más de 80 organizaciones no gubernamentales, destacan el impacto del bloqueo en Gaza sobre la salud de la población y sobre los servicios de salud y pidien una apertura inmediata de los cruces de Gaza.

Max Gaylard, Coordinador Humanitario para los territorios palestinos ocupados, dijo el miércoles 20 de enero 2010: "el cierre permanente de la Franja de Gaza está socavando el funcionamiento del sistema de salud y está poniendo en peligro la salud de 1,4 millones de personas en Gaza. Está causando el deterioro continuo de los determinantes sociales, económicos y ambientales de la salud. Se está dificultando la provisión de suministros médicos y la formación del personal de salud y se está impidiendo que los pacientes con condiciones médicas graves reciban tratamiento especializado oportuno fuera de Gaza".

La economía de Gaza está colapsada con un aumento del desempleo y la pobreza, lo que tendrá efectos adversos a largo plazo en la salud física y mental de la población. El medio ambiente también está en declive, a causa de las aguas residuales y la eliminación de residuos y otros peligros ambientales (incluidas las municiones y desechos médicos), que pueden dar lugar a efectos a largo plazo sobre la salud.

Más de 750.000 niños viven en Gaza. La comunidad humanitaria está profundamente preocupada por el futuro de esta generación, cuyas necesidades de salud no se están cubriendo. La disminución de la mortalidad infantil, que se ha producido de forma constante durante las últimas décadas, se ha estancado en los últimos años.

La falta de materiales de construcción, como consecuencia del bloqueo está afectando a los servicios esenciales de salud: la nueva ala quirúrgica en el hospital Shifa de Gaza está sin terminar desde 2006. Los hospitales y centros de atención primaria, dañados durante la operación 'plomo fundido", no se han reconstruido ya que los materiales de construcción no pueden entrar en Gaza. La Operación 'plomo fundido' ha dañado 15 de los 27 hospitales de Gaza y 43 de los 110 centros de atención primaria de salud fueron dañados o destruidos.

La entrada de suministros médicos y descartables en general está permitida en Gaza - aunque a menudo hay escasez de los mismos en la práctica. Cierto tipo de equipos médicos, tales como equipos de rayos X y los dispositivos electrónicos son muy difíciles de conseguir. El personal hospitalario con frecuencia carece de los equipos médicos que necesita.

Los dispositivos médicos están en su mayoría rotos, faltos de piezas de repuesto o fuera de la fecha de expiración. Los profesionales de la salud en Gaza se han aislado del mundo exterior. Desde el año 2000, muy pocos médicos, enfermeras o técnicos han sido capaces de salir de la Franja para la formación y actualización necesaria. Esto está socavando gravemente su capacidad para proporcionar atención médica de calidad.

Muchos tratamientos especializados, por ejemplo, la cirugía cardíaca compleja y ciertos tipos de cáncer, no están disponibles en Gaza y por lo tanto los pacientes son remitidos a tratamiento en hospitales fuera de Gaza. Sin embargo, las autoridades israelíes impiden o retrasan la salida de muchos pacientes y han perdido sus citas. Algunos han muerto esperando una respuesta.

Tony Laurance, Jefe de la Oficina de la OMS en Cisjordania y Gaza, dijo que "un sistema eficaz de atención de la salud no puede mantenerse aislado de la comunidad internacional. Las fronteras abiertas son necesarias para garantizar la salud de 1.4 millones de personas en Gaza"

La comunidad humanitaria cree que el sector de la salud tendría graves problemas para enfrentarse a otra situación de emergencia similar en escala a la de la operación Plomo Fundido del año pasado. El Gobierno de Israel tiene la obligación legal de garantizar el derecho a la salud de las personas en Gaza. La comunidad humanitaria hace un llamamiento para que los cruces a Gaza sean reabiertos.

Contactos de prensa:

Mike Bargman, Celular: 050-680-9255 Email: mbargman@headlinemedia.biz

Chiara Stefanini, Oficial de Derechos Humanos OMS, Celular: 972 (0) 54 717 9024 Email: cst@who-health.org

Richard Miron, Jefe de Información Pública, Oficina del Coordinador Especial, Móvil: +972 (0) 54 562 7825 Email: mironr@un.org